Angie Cuppari, más de 30 años con la danza en Stefenelli

La Escuela de Danzas de Angie Cuppari se presenta este domingo, 9 de junio, a las 19 horas en Casa de la Cultura.

Será la reposición del Festival de cierre de 2023 y participan todas las alumnas y las profesoras de la Escuela. En cuanto a la temática, se presentará un cuadro de clásico, basado en el cuento de Blancanieves y los siete enanitos.

“Participan todas las alumnas, desde las chiquitinas desde los tres años hasta las adultas que toman las clases de flamenco”, detalló Angie Cuppari quien es la directora de la Escuela y una referencia ineludible de la enseñanza de danzas, tarea que lleva adelante desde hace más de 30 años.

“Estoy dando clases desde el año 92, es decir, este año cumplo 32 años dando clases en Stefenelli”, relató Angie dando dimensión a su trayectoria y poniendo en valor el camino recorrido, sin dejar de recordar los inicios y quienes fueron clave en aquel momento.

“Los comienzos fueron en un aula del Colegio San Miguel que me prestaron para poder empezar a trabajar y dar las clases ahí. En ese momento estaba como director en la escuela, del colegio, estaba el padre Jaime Belli y la señora Consuelo García de Román, que fueron los dos que me dieron una mano gigante para yo poder empezar a dar clases en un aula de ese colegio porque obviamente no tenía un lugar, un espacio donde arrancar”.

Agregó que “ahí estuve dos años, hasta el año 94, que me pude hacer el salón en donde estoy ahora, actualmente, que es en la calle Suecia 470, siempre en Stefenelli”. 

En las vísperas de una nueva presentación en público, en la Casa de la Cultura, recordó además que “los primeros festivales también fueron en el Colegio San Miguel… muchos años hicimos las muestras de fin de año ahí en el SUM del colegio, que también me lo cedían los directores de la escuela”.

Formación, inicio y presente

“Soy egresada de la escuela de danzas de Ana María Tarenzi. Fueron mis inicios, egresé de su escuela un poco sin saber muy bien qué hacer cuando terminé el colegio secundario porque no tenía definido qué carrera universitaria seguir”, relató.

Y en ese momento llegó la decisión de “dar clases, a ver qué es lo que sucede y la verdad es que arranqué y no paré más hasta el día de hoy”.

Contó además que “el primer año fueron nueve alumnas, de las cuales cuatro eran sobrinas y el resto, las otras cinco, eran menas del barrio conocidas, de la cuadra”.

Hoy, las clases son de clásico, español, flamenco, moderno, urbano y para todas las edades, para todos los niveles. Tengo grupos desde los 3 años en adelante, hasta el grupo de adultas.

“La danza me eligió”

A modo de cierre, y como una conclusión de lo que para ella representa la danza, Angie asegura sentir “que la danza me eligió, me eligió a mí como para que sea parte de mi vida y mi profesión y acá estamos después de tantos años seguimos en carrera”.